Los camioneros que han sido multados en relación con las regulaciones aplicables sobre tiempo de trabajo y descanso pueden contar con una excepción. El gobierno francés emitió un decreto, que autoriza extender el tiempo de conducción si la multa fue otorgada durante las protestas de los „chalecos amarillos”. Los transportistas y las empresas de logística también resumieron las pérdidas relacionadas con las acciones de los manifestantes.
El gobierno francés reconoció que „la protesta interrumpió el tráfico y dificultó la entrega doméstica”. También admitió que muchos conductores se quedaron atrapados lejos de la familia y de la sede de la empresa debido a los atascos y obstrucciones relacionadas con protestas y bloqueos de carreteras.
Por lo tanto, el 1 de diciembre entró en vigor un decreto del Ministerio de Ecología y Desarrollo Sostenible, que autoriza extender por 2 horas el tiempo máximo diario de conducción y 4 horas de tiempo máximo semanal de conducción.
La excepción prevista en el decreto se aplica hasta el 4 de diciembre de 2018 hasta la medianoche. El documento no especifica desde cuándo, pero establece que se trata de la duración del „movimiento social nacional”. Las primeras protestas tuvieron lugar el 17 de noviembre.
Pérdidas de 400 millones de euros
Mientras que el gobierno se ha retrocedido ante las demandas de los „chalecos amarillos”, las empresas de transporte y logística estiman las pérdidas causadas por los numerosos bloqueos de carreteras, desplazándose a zonas industriales y depósitos de combustible.
En una declaración conjunta publicada ayer, la Federación Nacional de Transporte por Carretera (FNTR), la Unión de Transportes y Logística en Francia (Unión TLF) y la Unión para el Transporte por Carretera y Pasajeros UNOSTRA calcularon que las pérdidas sufridas por el sector del transporte ascienden a 400 millones de euros.Muchas empresas de transporte y logística se encuentran en una situación dramática que presenta un grave riesgo de que en poco tiempo la crisis se traduzca en una pérdida de empleos – se lee en un comunicado de prensa en el sitio web de FNTR.
Las organizaciones de la industria también piden el apoyo del gobierno. Según ellos, la policía no puede proporcionar a los camiones libertad de movimiento dentro del país, y la „inacción forzada de las empresas de transporte pronto causará la parálisis de toda la economía francesa”. Es indispensable que el gobierno implemente rápidamente un programa de apoyo para las empresas de transporte que no solo no son capaces de proporcionar, sino también de garantizar la entrega oportuna. De lo contrario, se verán obligados a cerrar el negocio – comentan Jean-Christophe Pic y Claude Blot, presidentes de FNTR y Union TLF.
Fuente: Trans.Info